Frase del día

sábado, 2 de septiembre de 2017

Análisis del Mito: Avatar El último Maestro Aire

"Agua. Tierra. Fuego. Aire. Hace muchos años, las cuatro naciones vivían en armonía. Pero todo cambió cuando la Nación del Fuego atacó. Sólo el Avatar, maestro de los cuatro elementos, podía detenerlos, pero cuando el mundo lo más lo necesitaba, desapareció. Después de cien años mi hermano y yo encontramos al nuevo Avatar, un Maestro Aire llamado Aang. Aunque sus habilidades para controlar el aire eran grandiosas, tenía mucho que aprender antes de poder salvar al mundo. Y yo creo que Aang podrá salvarnos."

[Alerta de Spoiler. Este post contiene detalles de la trama y el final de la serie]


Comenzaremos con esta serie de televisión que en lo personal me gusta mucho y refleja en gran medida aspectos Tolkieneanos (por llamarlos de alguna manera) que se presentaron en el post anterior.

Avatar tiene algo que nos ha atrapado a más de uno, tanto niños, jóvenes e incluso adultos. La narrativa y la animación son excelentes con elementos orientales que se nos presentan de una forma muy dinámica.

En 2008 la serie fue galardonada con el Premio Peabody que premia la forma de contar historias en medios electrónicos bajo la premisa de Historias que Importan. Al ser premiado se dijo de la serie lo siguiente:

Más cerca en espíritu y complejidad a la trilogía de El Señor de los Anillos que la típica historieta de aventuras de TV, Avatar: The Last Airbender una saga hecha en Estados Unidos, influenciada por el anime que dibuja sus rituales y filosofías del budismo tibetano, las tradiciones hindúes, griegas y japonesas y sus estilos de artes marciales de una variedad de culturas asiáticas. Elegantemente animada, con una partitura musical conmovedora, la serie sigue la odisea de Aang, un chico de 112 años amante de la diversión que es la encarnación actual del Avatar, el espíritu del planeta en forma humana. Con la ayuda de una banda de guerreros adolescentes y adolescentes y algunas criaturas fantásticas, Aang acepta a regañadientes su papel de llevar la paz a un mundo en guerra. La serie se distingue por personajes multidimensionales, relaciones personales inusualmente complicadas para una serie de dibujos animados y un sano respeto por las consecuencias de la guerra. Aunque está dirigido a niños de 8 y 9 años, ha sido adoptado por amantes de la mitología de fantasía de todas las edades.Avatar: The Last Airbender recibe un Premio Peabody.

La premisa es simple y la vemos en la introducción de cada episodio. Estamos en un mundo donde algunas personas tienen la capacidad de controlar cada uno (y solo uno) de los cuatro elementos. Agua, Tierra, Fuego y Aire y hace mucho tiempo la Nación del Fuego decidió invadir a las demás naciones creando un mundo en guerra. Se presenta al Avatar, el único ser capaz de dominar los cuatro elementos a la vez, que ha renacido en Aang, un maestro aire que estuvo congelado por 100 años y cuya misión es terminar esa guerra y para ello debe aprender a dominar los demás elementos. 

A lo largo de la serie vamos descubriendo el mundo (Mundo Secundario) y descubrimos como funciona y las leyes naturales que en el actúan. Vemos que cada una de las naciones es coherente con sus habilidades. Tenemos una nación del fuego industrializada gracias a su control y que usa sobre todo el metal para sus construcciones. En la nación de la Tierra tenemos grandes ciudades amuralladas y con sistemas de transporte que igualmente aprovechan el control de aquellos que pueden hacerlo. En la nación del agua del polo norte vemos calles hechas con ríos y construcciones de nieve y hielo, así como puertas que aprovechan el poder del agua control. Finalmente con los nómadas del aire (que vemos sobre todo en retrospectivas de Aang) tenemos ciudades en montañas altas e inaccesibles y se dedican sobre todo a la meditación y a la espiritualidad. Además cada nación tiene una forma de combate inspirada en artes marciales de nuestro mundo (Tai Chi para el agua, Kung Fu Hung Gar para la Tierra, Shaolin para los de Fuego y Ba Gua Zhang para los maestros aire).

Así pues esta coherencia con las leyes naturales hacen que la Fantasía sea perfectamente natural en el mundo que se desarrolla y si bien hay momentos en que llevamos al máximo estas limitaciones (como el metal-control o el sangre-control) sigue sin romper la barrera de las leyes (quizá en La leyenda de Korra lo hagan un tanto más, pero eso lo tomaré en otro post).

El siguiente concepto es la Renovación que es volver a ver cosas de una forma primordial, como si fuera algo nuevo. Lo vemos desde las técnicas de control donde cada maestro enseña como debe estar en armonía con los elementos como una extensión de si mismos. Toph cuenta como aprendió a "ver" el mundo que lo rodeaba con la Tierra Control, Iroh enseña a Zuko como desviar rayos siguiendo el flujo de energía con algo parecido al agua control. Redescubrimos el Ying y Yang al final de la primera temporada y damos un viaje a través de los siete chakras al final de la segunda. Siempre se trata de redescubrir y renovar conocimientos por lo cual se cubre perfectamente este propósito.

Después tenemos Evasión y Consuelo, porque Avatar no solamente trata de cosas espirituales y peleas, sino que existen sentimientos puramente humanos. La Redención, el Perdón, la Paz y el Amor son temas recurrentes que se tocan en los distintos episodios y que nos hacen sentir empatía con los personajes. Nuestro Mundo Primario esta lleno de maldad y dolor, tal como el mundo de Avatar, pero en este Mundo Secundario todos estos valores nos dan un Consuelo de que el mundo puede llegar a ser mejor si nos aferramos a ellos por muy difícil que sea. 

Con todo esto se desarrolla la leyenda de Aang y en sus viajes no solo se intenta salvar al mundo sino que vemos cual es el mundo que queremos salvar cuando visitamos diferentes provincias que han sido asoladas por la Guerra. Además los personajes evolucionan y toman decisiones. Quizá el que más lo hace es Zuko quien más que un villano o un héroe, es una persona como nosotros que no siempre ha tomado las decisiones correctas, que siente dolor y se siente perdido en más de un sentido pero por fortuna contó con el apoyo de su tío en ocasiones difíciles y supo hacer lo correcto cuando estuvo solo (Aquí podríamos hacer un análisis más  profundo aplicando el esquema del Viaje del Héroe de Joshep Campbell, pero hasta ahí lo dejaré)

Finalmente tenemos la Eucatástrofe al final de la serie. Como bien dice Tolkien, la eucatástrofe no implica que no haya catástrofes, como al final de la segunda temporada donde todo se vuelve muy oscuro o el día de la invasión donde el plan del eclipse fracasa, pues estas son necesarias para hacer sentir la tensión al final de que todo puede fracasar. En la batalla final nos mantienen en suspenso todo el tiempo con cambios de planos entre los distintos personajes, Zuko y Katara con Azula, Toph, Suki y Sokka en las naves, Iroh y la Orden del Loto Blanco en Ba Sing Se y finalmente Ozai contra Aang en cuya escena final nos mantiene pasmados cuando usa energía-control. "Para controlar la energía de otros, tu propio espíritu debe ser inquebrantable o serás corrompido y destruido" (escuchamos del León-Tortuga). Aang se ve consumido, por un instante pensamos que todo está perdido y justo antes de que todo se desvanezca ocurre el giro hacia el bien . La Eucatástrofe.

Para concluir, hubo un punto que no toque del post base y es el de Aplicabilidad, pues es algo que será distinto en cada espectador e incluso en cada momento de la vida del mismo, pues al igual que ESDLA, Avatar contiene infinidad de significados aplicables pues es una historia viva y no una alegoría. Espero que hayan disfrutado este análisis y me compartan que es lo que les ha dejado esta maravillosa serie.





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